Ferroviaria Andina, del empresario Carlos Gill, negocia con el Gobierno la recuperación de las barcazas

La Ferroviaria Andina, de propiedad del empresario venezolano Carlos Gill (posee el 50 % de las acciones) y socio del periódico La Razón, es una de las empresas interesadas, junto a un consorcio español, en la recuperación de las 16 barcazas y dos remolcadores involucradas en un millonario caso de corrupción.

"Hay dos empresas una denominada Ferroviaria Andina con la que estamos trabajando y se ha presentado un consorcio español porque también tiene interés de consolidar una alianza estratégica", informó el viceministro de Defensa, Fernando Aramayo, a su retorno de China.

En el plazo de 15 o 20 días se consolidará el acuerdo con una de las empresas, el objetivo del socio estratégico es que "pondrá los recursos necesarios, es decir, lo que se deba por el almacenaje de las barcazas y la conclusión de los empujadores y el transporte hasta Puerto Quijarro", añadió el Viceministro. El mes de septiembre de 2014, se informó que Gill asumió la presidencia de la Ferroviaria Andina.

El empresario también es accionista en la Ferroviaria Oriental y es socio mayoritario del diario La Razón. Ahora, también está interesado en asumir los costos para la recuperación de las barcazas y los remocaldores. El Viceministro de Defensa informó que en tres meses, hasta el 23 de marzo, podrían llegar al país las 16 barcazas y dos remocaldores, que hace casi seis años ya deberían estar en territorio nacional, no obstante se vieron involucrados en un escándalo de corrupción.

La Empresa Naviera Boliviana ya pagó casi 30 millones de dólares por la construcción y transporte de 16 barcazas y dos empujadores. Se suscribieron contratos con violaciones a las leyes y se realizaron subrogaciones fuera de la norma con empresas coreanas que al final desaparecieron sin cumplir los acuerdos. No obstante ya se pagó por estos bienes, incluido su traslado hasta puerto Rosario-Argentina.

"La Enabol a través de una firma anónima mixta que va a hacer con una empresa transportadora logística, ya estamos en estudio y la firma de la carta de intenciones", sostuvo. Actualmente, las barcazas tienen una orden "paralizada" de remate. Aramayo informó que el Tribunal Marítimo de China nuevamente ordenó que por tres meses no se remataran, entretanto Bolivia tiene que consolidar el derecho propietario de los bienes navieros, una vez que se lo haga, se cancelará por el almacenaje de las barcazas 4,5 millones de dólares.

Sin embargo, otro monto se tendría que cancelar para la concluir la construcción de los dos remocaldores "que falta aproximadamente 30%, los montos son elevados y se está trabajando una buena negociación", añadió la autoridad. "Existe la posibilidad de que estén llegando en los siguientes tres meses", sostuvo al referirse a algunos plazos para concretar negociaciones y el transporte de los bienes.